No hay ducha como la ducha de casa

Que sí, que la comida de las madres está bien, pero a mí lo que me convence de que estoy en casa es el cuarto de baño. Concretamente, la bañera, con la ducha en modo lluvia, que sale enseguida calentita y no se corta de repente ni te achicharra viva, con tanta fuerza que no se oye ni la radio (me gusta ducharme con música). Y luego las toallas, que son tan gordas que se podrían quedar de pie solitas si no fueran tan suaves. En serio ¿hay algún truco para lavar las toallas? ¿Algo que nadie te cuente hasta que tienes hijos, para que puedas obligarlos a volver a casa de vez en cuando?

Pues eso. Que soy Bathman

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